Reseña #139: Palabras que nunca te dije - María Martínez
Título: Palabras que nunca te dije
Autor: María Martínez
Año de lanzamiento: Febrero, 2017
Editorial: Titania
Distribución: Ediciones Urano México
N° de páginas: 444
Calificación en GoodReads: ⋆ ⋆ ⋆ ⋆
Autor: María Martínez
Año de lanzamiento: Febrero, 2017
Editorial: Titania
Distribución: Ediciones Urano México
N° de páginas: 444
Calificación en GoodReads: ⋆ ⋆ ⋆ ⋆
«Existe un amor por el que merece la pena esperar y luchar»
Sara está a punto de cumplir los treinta y ya ha perdido la esperanza y la ilusión en un matrimonio que va a la deriva. Ha pasado demasiado tiempo ignorando su vida y sabe que no es feliz. Ya no existe la chica que perseguía sus sueños y en su lugar hay una mujer a la que apenas logra comprender.
Lo que Sara no sabe es que un suceso inesperado sacudirá su pequeño mundo por completo. Cuando Christina, su mejor amiga, le pida que viaje hasta un tranquilo pueblo de La Provenza para hacerse cargo de las reformas de un bonito Château que pretende convertir en un hotel.
Han pasado siete meses desde que los demonios de Jayden lo llevaron hasta Tullia y aún no ha conseguido enfrentarse a ellos. Mientras trata de recomponer su presente y asumir un doloroso pasado, se gana la vida haciendo chapuzas para los vecinos del pueblo. Amable, divertido, y con una personalidad encantadora, se ha convertido en ese amigo al que todos recurren para solucionar sus problemas.
Una casualidad, o puede que el destino, une las vidas de Sara y Jayden. Dos almas rotas que, sin darse cuenta, empiezan a necesitarse para sobrevivir.
Comienza el verano y, entre campos de lavanda, estrellas fugaces y luciérnagas, ambos descubrirán que, quizá, merezcan una segunda oportunidad.
¡BUENO PUEEEEEEEEEEES!
No sé qué decir porque ayer me gustaba el final pero hoy ya no tanto. Voy a atribuirlo a que ayer estaba sensible y romántica pero hoy estoy racional. Como...mucho. Lo dejo en 4 estrellas porque me sacó lágrimas (ayer, ¿ya dije que estaba sensible?) y para mí se acabó cuando él no volvió...quienes lo hayan leído sabrán a qué me refiero y, por Dios, que Christina, la mejor amiga de Sara es tan mi mejor amiga que daba miedo jajaja, aparece poco pero como me hizo la vida ese personaje. Ah sí, de nuevo 4, por hacerme reír casi todo el libro. Ya va, pues sí que al final el cuatro es bien ganado
«Las personas necesitamos sentirnos amadas y deseadas, si no, nos marchitamos»
Seré honesta y diré que el lugarsito lo imaginaba justo así al frente, hasta del color y todo, pero con una puerta roja...no recuerdo que el libro lo dijera en un principio pero yo siempre imagino puertas rojas (no sé, no me pregunten el motivo), así que en un lugar así, en Tullia, Sara debe pasar tres semanas ayudando a la distancia a su mejor amiga para que la apertura del hotel sea en tiempo y forma, el contratista le ha quedado mal y ella, a regañadientes, ha decidido ir a trabajar para Christina. Tengo en la cabeza, bien metida, la idea de la película Bajo el sol de Toscana, no la he visto más que dos o tres veces por pura casualidad (sí, cuando estoy muy aburrida y prendo la TV y por casualidad está) así que, más o menos me viene a que Sara tenía las manos bastante ocupadas cuando llegó al lugar.
Ay, esa mujer. Es lo más triste que me ha pasado en la vida literaria, creo. Bien, Sara es una mujer casada de 29 años que tiene un hijo de 10, Daniel, al que adora pero al que él tolera...el niño no es malo (gracias al cielo) pero sí está resentido con ella. Colin Gibbs es el esposo de Sara, un workaholic que no es mal hombre pero que se empeña en comportarse como un imbécil :) Aunque lo perdoné, la verdad es que la culpa de la mierda de vida marital que llevaba con Sara no era enteramente culpa suya. Hay que decir la verdad.
Sara es una mujer llena de inseguridades, que se ha vuelto prácticamente un fantasma para todos y que, de hecho, si no habla no te enteras que está allí. Literal. Es muy desesperante pero no llega al borde de caer mal porque las situaciones a las que se vio enfrentada hacen que tengamos un margen de referencia que permite que se entienda el comportamiento tan...¿triste? en el que se encuentra, hasta que...
Aparece Jayden Dixon, un SEAL (en serio, ¿qué tienen con los SEAL? *googlea, lo entiende todo y agradece al cielo*) que está pasando los meses en casa de una preciosa mujer mayor llamada Jeanne, ocultándole un secreto enorme que lo carcome por dentro. Jayden tiene 34 años, y tras una visita inesperada donde se alojaba, termina quedándose donde Sara (¡OH SORPRESA!) y aunque la química entre ellos es innegable, se aguantan como pueden.
Por una semana
¡Vaya pero si qué fuertes los niños, ¿no?!
«Hemos compartido el espacio, pero nunca la vida»
La verdad es que yo no habría durado dos horas, ¿para qué mentir? ¿Con la vida de Sara, y teniendo pedazo de monumento en la misma casa? No, perdonen pero no me haré de la boca chiquita...lean, lean para que sepan que yo no estoy moralmente TAN mal, Sara tenía derecho, ¡QUE LO TENÍA DIJE! Bueno, si fuera mi mamá ella no lo habría hecho (sí, le pregunté) pero de todas maneras, yo soy pecadora y me iré al infierno, pues que me vaya bien al menos...así que sí, perdón, me desvíe...así que se enamoran, como chiquitos adolescentes (que así dicen, eso no me pasó de adolescente), así que de verdad, qué bonito fue todo, perfecto, idílico, ahora el problema es el cargo de consciencia (que sí tienen) y el tiempo, porque es muy limitado. Tres semanas, perdieron una, vivieron felices por siempre (dos) y entonces, ¡SORPRESA! Llega el esposo, las cosas se tuercen y el cielo se derrumba sobre sus cabezas...
Estoy inspirada, parece...así que, sí, todo se va al carajo y ahí fue donde lloré y dije: QUE FINAL TAN MÁS PERFECTO Y REAL.
Pero resulta que me faltaban como 5 más y un epílogo, pero para mí no cuentan así que para mí se acabó cuando lloré junto con Sara y los mocos no se hicieron más fáciles de disimular (sí, es que estaba en un lugar público). Así que, aunque el final verdadero no me dejó tan emocionada, la verdad es que mi lado romántico lo ha hecho sentir que todo está bien en la tierra cuando amas a alguien tanto que no puedes siquiera morirte porque la fuerza de voluntad te levanta y hace que el corazón siga latiendo, o eso dicen algunos libros, ¿qué sé yo? No soy escritora.
Así que, chulitos, cuéntenme, ¿ya lo leyeron? ó, ¿les interesa hacerse con el pronto? Espero por sus comentarios, xx